Aprender a soplar la flauta de émbolo, se convierte en un reto para bebés y niños, que los ayudará a aprender a controlar su respiración y a fortalecer los músculos que intervienen en el habla.
Jugar con el sonido cambiante de la flauta de émbolo (ascendente /descendente) favorece el desarrollo de habilidades de percepción auditiva relacionadas con las alturas del sonido (agudo/grave).