Contando historias con Lila
Edad recomendada: 24 a 6 años
Usamos a Lila para inventar historias, y al personificarla movemos las alas, la cresta y todo su cuerpo para dar una sensación más real, además usamos diferentes entonaciones en la voz e inventamos historias que pueden abarcar las temáticas que deseemos como las emociones, motivación para la alimentación, valores en general, situaciones cotidianas, o el tema que elijamos.
Podemos hacer una historia sonorizada que hará que nuestro hijo disfrute más esta experiencia. Para ello podemos simular por ejemplo los pasos al caminar dando toques sobre una caja de cartón, el sonido de los pollitos con un silbido, el viento soplando, entre otros sonidos que pueda necesitar nuestra historia.
Una vez que hayamos finalizado de contar la historia a nuestro hijo, le hacemos preguntas sobre lo que sucedió y cómo cambiaría la situación para que nos de su propia versión de la historia, por ejemplo:
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¿Qué le pasó al pollito blanco? ¿Qué hubiera pasado si es lobo no se hubiera comido el huevo de la Gallina Lila? ¿Qué habría pasado si el pollito negro no se hubiera perdido?
