Duración y frecuencia

Duración

¡El bebé debe ser amamantado hasta que quede lleno! No debemos limitar su tiempo de alimentación.

El bebé debe ser amamantado hasta que quede lleno. No debemos limitar su tiempo de alimentación.

Debemos vaciar completamente el pecho del cual el bebé se está alimentando, pues la composición de la leche varía: la leche inicial es rica en lactosa (calorías) y agua, luego continúa la leche rica en proteínas y la leche del final que es rica en grasas. El bebé necesita de todos estos nutrientes para su desarrollo.

Para la próxima toma, el bebé debe comenzar con el próximo seno.

Si después de vaciado el primer seno continúa con hambre, le ofrecemos el segundo seno. Si solo tomó un poco del segundo seno, en la próxima toma ofrecemos el mismo seno; para que el bebé logre tomar todos los nutrientes de la leche, según lo explicado anteriormente.

Lo mismo ocurre cuando la mamá tiene tanta leche, que el bebé no logra vaciar el seno en una toma. Debe terminar el seno en el que hizo la toma anterior y luego cambiar de seno.

Es difícil establecer un tiempo, ya que todos los bebés tienen ritmo de succión y necesidades diferentes. Hay quienes logran succionar toda la leche en 8 minutos y otros se demoran hasta más de 25 minutos. Por lo tanto, el tiempo no es una medida estándar para todos los bebés. Cada mamá va conociendo su bebé, y con el tiempo irá determinando sus necesidades.

Muchas mamás se estresan llevando cuentas con el reloj en la mano. Este estrés sólo afectará el proceso de lactancia.

Frecuencia

El bebé debe alimentarse cada 2 o 3 horas.

La frecuencia de alimentación la determina cada bebé, de acuerdo a sus necesidades. Siempre que el bebé tenga hambre, debemos alimentarlo.

En su primer mes de vida, los bebés deben realizar entre 8 y 12 tomas cada 24 horas. Esto significa que deben alimentarse cada 2 o 3 horas. Si el bebé está dormido y pasa este tiempo, es importante despertarlo para alimentarlo.

El tiempo entre toma y toma comienza a contar cuando el bebé inicia la toma.

Mamá: ¡relájate, debes estar tranquila y confiar en tu instinto, disfruta tu lactancia!