¿Qué hacer para que los niños aprendan a masticar?

¿Qué hacer para que los niños aprendan a masticar?

¿Qué hacer para que los niños aprendan a masticar?

Si un niño a los dos años aún tiene dificultades de masticación, lo primero que debemos hacer es evaluar cuáles son las consistencias de los alimentos, que se utilizan con mayor frecuencia en la alimentación familiar.
De esta manera, tendremos claro si ha estado expuesto o no de manera repetitiva a las diferentes consistencias.

Te damos dos recomendaciones muy importantes para ayudar a tus hijos a aceptar otras consistencias y masticar.

1. Incrementa gradualmente las consistencias de los alimentos:

Si culturalmente en la familia se consumen alimentos blandos o con poca consistencia (sancochos, coladas, cremas, etc), el niño no ha tenido la oportunidad de experimentar consistencias sólidas. En este caso, recomendamos ir incrementando gradualmente la consistencia de los alimentos:

Blandos  ➡️ Triturados ➡️  Semisólidos ➡️ Sólidos

También puedes incluir gradualmente alimentos de diferentes consistencias, en los alimentos blandos que le agradan y acepta. Inicia mezclando los alimentos más difíciles de masticar con alimentos suaves que está acostumbrado a comer. Cuando acepte esta consistencia, ofrécelos por separado y en diferentes presentaciones.

E JEMPLO:
Si solo toma sopa licuada, añade a esa sopa, arroz y carne molida. Cuando tolere estas consistencias, ofrece por separado el arroz y la carne en forma de torticas. Más adelante, ofrece la carne asada partida en cuadritos, la cual es más sólida y requiere más movimientos masticatorios.

¡ATENCIÓN!

Si los cuidadores han ofrecido alimentos en todas las consistencias incluso sólidos, pero el niño no los acepta o no los traga, es necesario una evaluación integral por parte del pediatra o personal de salud, para que verifique si hay alguna causa de tipo físico, emocional o comportamental.

 

2. Enséñale a masticar.

Muéstrale cómo pruebas la comida, cómo masticas y cómo la saboreas.

Ahora es el turno de él. Empieza con galletas o algún alimento fácil de masticar, jugando a ponerlo en diferentes partes del cuerpo (las manos, la nariz, las mejillas). Luego le pides permiso para tocar los labios con el alimento. Si accede, los tocas y retiras el alimento. Luego haces lo mismo en los dientes. Continúa poniendo el alimento y retirándolo, recorriendo todos los dientes hasta llegar a las muelas. Al final le dices, ahora vamos a morder. Pones el alimento en las muelas y pides que muerda. Repites mordiendo con diferentes dientes.

Realiza esta actividad variando las consistencias. Empieza con alimentos suaves como aguacate, papa bien cocida, coliflor, zuquini y pepino sin pepas.
Luego avanza a frutas como mango, melón, banano y papaya, pasando a sólidos como manzana, pera, coco de agua en tiras, etc.
Estimula la masticación con pechuga de pollo, pescado, carne roja en barritas. Al poner las carnes o alimentos de consistencia más cauchosa sobre las muelas, pedimos que presione varias veces. No le pidas inicialmente que las trague, pues primero hay qué lograr que mastique.

 

 

 

Leave a comment

* Required fields

Please note: comments must be approved before they are published.

View our privacy policy